El mundo es bizarro. Todos somos extranjeros en casi todos lados. Mis fotos en tiempo real (o no) y mis canciones favoritas. Eventualmente cobertura de Mundiales de Fútbol desde tierras lejanas via @lajeca.
sábado, marzo 01, 2008
Playas Oscuras (Los Visitantes)
Editado originalmente en Salud Universal (1993)
Autor Roberto "Palo" Pandolfo
Hace poco leí en un reportaje a Palo Pandolfo que se sentía muy incómodo en la posición de líder. La manera en que durante los años ´80 y ´90 creó y destruyó dos o tres candidatas a mejor banda del país prueban eso.
A principios de los ´90, después de haber seguido como fans durante dos discos a Don Cornelio (con mi amigo Gala como compañero permanente) y de haber sentido como un triunfo propio la participación del gordo Claudio como percusionista invitado en el lanzamiento de Oktubre en Paladium, fui a ver en Cemento uno de los primeros shows de Los Visitantes.
A esta altura, Palo ya era reconocido, no como una promesa, sino como uno de los músicos que se esperaba liderara la renovación del rock nacional post Twist, Virus, Riff, Abuelos, etc. En Cemento estaban las mil personas que se necesitan para llenar el primer espacio. En el segundo, para el lado de la barra, se mezclaban modelos (me encontré con el ex novio de quien era mi novia y me dijo que había ido porque Palo era de Mar del Plata, como él) con jipis y post punks. El rock chabón, afortunadamente todavía no existía.
Tarde, bien entrada la noche, sube al escenario el baterista Jorge Albornoz y empieza a darle al redo como sin ganas. Después de cuatro o cinco minutos así (nosotros nos preguntábamos si nos habíamos equivocado de show o habíamos venido a ver a Brian Eno), sube Federico Gahzarossian y hace lo mismo con el bajo. Al rato, Palo enchufa la guitarra y rasguea un poco. Después tocan a medias un par de temas. En un momento, como descubriendo que había gente mirándolo y que no estaba en el living de la casa, Palo saluda a la gente y avisa que van a empezar a tocar. En diez minutos hicieron la prueba de sonido, con toda la gente enfrente! Y uno que cuando iba a tocar se iba a las 5 de la tarde del día del show y se comía cuatro horas de "ponele más agudos, ahí está bien. Ahora dale al bombo"! Los pibes se subieron, rasquetearon un poco los instrumentos y se largaron (e hicieron un show formidable, con Palo estrenando su forma de cantar entre Luca Prodan y Tom Waits).
Playas Oscuras siempre me pareció de lo mejor de Los Visitantes. Como viejo turista de Mar del Plata en invierno, siempre pensé que esta canción era la forma más alegre que se podía describir a un suicida. No matándose como una figura trágica, a la Alfonsina Storni, sino como entregándose a una fuerza mayor, poniéndole el cuerpo a un arrebato de la naturaleza contra el que somos demasiado impotentes para luchar.
El hundió su nariz en la espuma de las olas
Los rebotes del sol coronaron su final
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Episodio II
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